Florida - Nora Sandigo (derecha) es la representante y defensora de más de 600 niños, hijos de inmigrantes indocumentados. Como directora de la Fraternidad Americana se ha dado a la tarea de mantener en los medios de comunicación las situaciones que afrontan los niños una vez sus padres son arrestados o deportados.
Sandigo envió una carta abierta al Presidente Barack Obama y éste fue su reclamo…
Por primera vez en muchos años, millones de personas en Estados Unidos vieron un rayito de esperanza y una pronta respuesta a sus suplicas por justicia en la última campaña presidencial, durante la cual el entonces candidato presidencial Barack Obama promocionó y habló de la reforma migratoria como una de sus prioridades principales una vez en la Casa Blanca. Sin embargo, han pasado 6 meses y mientras que Washington atiende diligentemente otros asuntos nacionales e internacionales, no puedo evitar preguntarle al Presidente Obama, “¿Qué sucedió con su promesa de una pronta reforma migratoria a los millones de inmigrantes en Estados Unidos y el gran porcentaje de Latinos que dimos nuestros votos para elegirlo como nuestro presidente?” Su presidencia es sin duda histórica y excepcional. Sus primeros 100 días en la presidencia probaron ser exitosos con todos sus logros y nombramientos oficiales, pero ya pasaron y aún estamos esperando a que se inicien las charlas para la reforma migratoria, aunque usted dijo que tenía planes de empezarlas en Mayo. ¿Cuántos días más tendremos que esperar para que un plan de reforma sea diseñado y presentado al Congreso y el Senado para que lo revisen y se establezca la atmósfera correcta para que sea implementado?
Lo que me preocupa de esta situación es que la demora en responder a éste asunto no refleja el carácter del hombre al cual vimos expresar hace unos cuantos meses gran preocupación por la separación de las familias, por las fallidas leyes y políticas migratorias. Se nos fue prometido un cambio en la ley que protegería la unidad familiar y se enfocaría en criminales y terroristas, no en familias que siguen las reglas de la sociedad y las leyes a pesar de su falta de estatus en este país. Como la defensora de cientos de niños, líder comunitaria y activista que está en contacto directo con cientos de estas familias y ha visto su dolor por muchos años, me preocupa que la política continúa siendo la misma que durante otras administraciones presidenciales. Aunque bien es cierto que ha habido muchos cambios positivos durante estos pocos meses, la política migratoria continua igual y esta situación me hace preguntarme si será posible que nuestro presidente fomentara la misma política que criticó tan fuertemente durante su campaña.
Siempre he creído que las cosas y los problemas no son iguales durante las elecciones – la perspectiva y la visión de cómo debe ser manejado un asunto cambia una vez el candidato toma su cargo oficial como presidente. Durante las elecciones el candidato se imagina una solución, pero una vez presidente dar a luz esa visión es un proceso complejo que requiere mucho mas disposición que la simple intención de llevarlo a cabo. La elección de nuestro presidente representa un cambio positivo para nuestra nación y un gran avance de quienes somos y lo que hemos logrado como el pueblo Americano. Sin embargo, aún tenemos mucho camino por recorrer para continuar desafiando los estereotipos, y éste cambio tendría un mayor impacto si beneficiara y otorgara poder a todas la minorías en nuestra nación. Es importante tener presente que aunque muchas minorías hoy en día disfrutan el privilegio de la ciudadanía Americana, en última instancia son los hijos, nietos o descendientes de inmigrantes.
Los Estados Unidos es una nación de inmigrantes – los padres de esta gran nación eran inmigrantes -, y no olvidemos que ellos fueron los autores de la esencia de nuestra Constitución “igualdad y justicia para todos.” ¿Acaso hemos olvidado nuestra historia y los grandes hombres y mujeres que cruzaron océanos y continentes en busca de libertad, esperanza y un mejor futuro? Aún más, América olvida que nuestro actual presidente Barack Obama personifica y expresa el sueño de los padres de nuestra nación, nuestros primeros grandes líderes y presidentes (los cuales eran inmigrantes), ya que él es el hijo de un inmigrante. ¿Qué responden a todo esto los Americanos que implacablemente condenan a los inmigrantes y abogan para quitarles sus derechos, sus sueños y sus familias, al haber elegido al líder que representa el cambio y la esperanza que nuestra nación tanto anhelaba siendo el hijo de un inmigrante? Nuestra nación anhelaba un líder que pudiese ponerse en nuestro lugar y entender las peticiones de otros aparte de la elite de nuestra sociedad; un líder que desafiara las creencias comunes y fallidos patrones de gobierno. Nosotros elegimos un líder que representaba cambio y esperanza, y es eso exactamente lo que esperamos ver porque sabemos que es posible.
Creo fielmente en el liderazgo y la sabiduría del Presidente Obama, y creo que la reforma migratoria es una meta alcanzable aún cuando va en contra de la agenda política de Washington. No estoy cuestionando las habilidades del Presidente Obama, mi única pregunta es ¿CUÁNDO? Ya se cumplieron más de cien días. ¿A los millones de personas que pusieron su confianza en él están preguntando cuánto tiempo más pasará para que sus promesas de campaña sean cumplidas?
Presidente Obama, haga historia, firme una orden ejecutiva que pare las redadas migratorias y deportaciones, ¡haga la reforma migratoria una realidad!
Nora Sandigo Representante y Defensora de los Niños Ciudadanos Americanos Hijos de Inmigrantes Directora Ejecutiva de American Fraternity