miércoles, 1 de diciembre de 2010

Una acta que alberga sueños


El DREAM Act es posiblemente el proyecto con el nombre más representativo. El Acta de Fomento para el Progreso, Alivio y Educación para Menores Extranjeros (DREAM Act, por sus siglas en inglés) tiene el propósito de que los estudiantes indocumentados que terminan la secundaria, o escuela superior, puedan obtener un grado universitario.

Muchos de estos jóvenes llegaron por la vía legal a la nación donde reside el sueño americano, pero la vigencia de sus documentos expiró. Los que han logrado entrar a la universidad pagan hasta tres veces más que un estudiante residente por la misma carrera; para ellos la ayuda financiera es casi inexistente y la presión de que pueden ser deportados en cualquier momento es interminable. Llevarse el sueño acuesta a un país que posiblemente no conocen, a hablar un idioma que no dominan y abandonar lo que toda su vida han visto como un hogar es lo que intenta revocar el DREAM Act. De este proyecto ser aprobado simplificaría la vida de los estudiantes y le daría vida al sueño de obtener una carrera universitaria que les permitiría ser candidatos a obtener buenos empleos, y gozar así de una mejor calidad de vida.

Si el Congreso decide aprobar el proyecto los universitarios podrían, entre otras cosas, solicitar ayuda financiera, pagar las mismas tarifas que el resto de los estudiantes residentes, visa de residencia temporal e incluso residencia legal definitiva. Eso sí, quienes gocen de estos privilegios deberán demostrar la alegría de que el acta fuera aprobada a través de buenas calificaciones y buen comportamiento social, de esto dependerá que puedan disfrutar de los beneficios que les ofrece este proyecto.

En Estados Unidos cientos de estudiantes aguardan porque el proyecto sea aprobado para correr a las aulas mientras que en otros países “corren” para intentar llevar los universitarios a las aulas. Irónicamente, a estos que se les están poniendo tantas trabas en su crecimiento como personas, estudiantes y futuros líderes serán posiblemente quienes mejor representen la Nación donde se encuban tantos sueños. Posiblemente sean quienes echen a andar los sueños de quienes ahora los tienen estancados aún con las posiciones profesionales para materializarlos.

El mejor “termómetro” lo tendremos si apoyan la ley. Sólo faltará esperar seis años y ver lo que en ese período pueden lograr los que hoy batallan por ir a la universidad.

“Sueña grandes sueños”

La revista Time incluyó al periodista y escritor Jorge Ramos en su listado de “los 25 hispanos más influyentes de Estados Unidos”. Otras publicaciones también lo han añadido a otras listas como “los 10 latinos más admirados de Estados Unidos, “los 101 líderes de la comunidad hispana” y los “100 latinos de mayor influencia en Norteamérica”, entre otros. Tantos reconocimientos forman parte de su incansable labor en los medios de comunicación. En noviembre de 1986 comenzó en Univision, una de las más importantes cadenas de la televisión hispana, aún permanece allí.

La columna que podrás leer a continuación fue publicada por él en su página cibernética, http://www.jorgeramos.com/. Al concluirla sabrás por qué la publico en este blog.


SUEÑA GRANDES SUEÑOS

Por Jorge Ramos Avalos

November 15, 2010
La gran crueldad del sistema educativo de Estados Unidos es que le ha permitido a millones de estudiantes indocumentados ir a la secundaria o highschool. Pero, después, les prohíbe ir a la universidad. Eso puede cambiar en los próximos días si el congreso en Washington deja a un lado la politiquería y se atreve a aprobar el llamado Dream Act.

Cada año más de 60 mil estudiantes se quedan sin ir a la universidad por problemas migratorios. El Dream Act beneficiaría potencialmente a dos millones de estudiantes indocumentados al otorgarles una residencia permanente si cumplen dos años de universidad o en el servicio militar.

Estos jóvenes no tienen la culpa de su situación migratoria. Los trajeron sus papás a Estados Unidos cuando eran bebés o menores de edad. Son, en esencia, norteamericanos. Pero no tienen los papeles para comprobarlo ni acceso a préstamos,
becas o ayuda federal. Y regresarlos al país donde nacieron sería otra crueldad: lo desconocen totalmente y, en algunos casos, ni siquiera hablan el idioma natal.
Hace poco recibí unas cartas de varios estudiantes indocumentados y quiero, sin identificarlos, compartir lo que me dijeron:

-“Algunas veces trato de imaginar…en qué momento otros empezaron a verme como ‘monstruo’. Pudo haber sido en 1993. Yo tenía cuatro años de edad. De la noche a la mañana mi visa expiró y me convertí en indocumentado.”

-“Desde que yo tenía cinco años, mi papá pasaba la mayoría del tiempo en este país trabajando…por esto, y por querer estar juntos, mis padres decidieron mudarse a los Estados Unidos.”

-“Nací en Tamaulipas, México, ubicado a dos millas del río Grande. A los cuatro años emigré junto con mi familia a Houston, Texas, y en pocos meses me convertí en una persona indocumentada.”

Tengo más cartas pero la historia se repite. Estamos hablando de jóvenes talentosos, con deseos de seguir estudiando, que pueden contribuir enormemente al futuro de Estados Unidos y del mundo…pero no los dejamos.
Hay que cambiar esto. Ya. Y esto es lo que el congreso puede hacer en los próximos días.
Nancy Pelosi, la presidenta de la Cámara de Representantes, está considerando seriamente poner el Dream Act a votación muy pronto, según reportó Político. En la Cámara de Representantes sí hay actualmente los votos necesarios para su aprobación.
Pero el problema está en el senado.

El líder del senado, Harry Reid, me hizo la siguiente promesa durante una entrevista unos días antes de las elecciones del 2 de noviembre:
-“¿Se puede comprometer ahora mismo a llevar el Dream Act a votación en el senado antes de fin de año?” le pregunté

-“Sí…la respuesta es sí”, me contestó. Pero después apuntó al verdadero problema. “Pero necesito a algunos Republicanos que me ayuden.”
Reid está dispuesto a cumplir su promesa. Pero eso no es suficiente.

El Dream Act no alcanzó los 60 votos que se necesitan para ser aprobado por el senado el pasado mes de septiembre. Ningún senador Republicano votó a favor. Y para que ahora sea aprobado se necesita, una vez más, la ayuda de los Republicanos.
Hasta el momento ninguno se ha comprometido a hacerlo. Pero aún hay tiempo para que reconsideren y cambien de posición.

Basta recordar que ningún partido político puede llegar a la Casa Blanca sin el voto latino y que el Dream Act es un tema apoyado mayoritariamente por los hispanos.
Los votantes latinos recordarán durante las próximas elecciones presidenciales del 2012 quienes ayudaron a sus jóvenes y quienes no lo hicieron.

Votar a favor del Dream Act es lo moralmente correcto, corrige una vieja injusticia, promueve la educación, demuestra humanismo y compasión, y hace de Estados Unidos un país mejor.

A estos jóvenes indocumentados les hemos dicho toda su vida que sueñen grandes sueños. No se vale impedírselos ahora.

jueves, 13 de mayo de 2010

El peso de las palabras


El tema de la inmigración es discutido constantemente por los medios de comunicación. Las noticias sobre redadas, deportaciones e incluso la aprobación de leyes que son totalmente indignantes hacen que escuchemos constantemente los términos “ilegales” e “indocumentados”.

Según el diccionario “ilegal” es un acto que es contra de la ley. Mientras que “indocumentado” es dicho de una persona que no lleva consigo documento oficial por el cual pueda identificarse, o que carece de él.

La Asociación Nacional de Periodistas Hispanos (NAHJ, por sus siglas en inglés), el 15 de septiembre de 2009, envió un correo masivo en el que instaba a, sus alrededor de 1,500, miembros a no utilizar el adjetivo ilegales para referirse a aquellas personas que entran en un territorio sin permiso para hacerlo.

Por su definición, usar el término ilegal hace que la expresión sea gramaticalmente incorrecta. Además la NAHJ aseguró que esto criminaliza y deshumaniza a la persona, y no a su acción.

Sin embargo, la aclaración ha sido pasada por alto. Continúo leyendo y escuchando de “ilegales” en los medios de comunicación. El término es peyorativo y hace que se pierda de perspectiva que los que abandonan su país, sus familias y amigos también merecen ser respetados y comprendidos. ¿Acaso no son seres humanos también?

miércoles, 14 de abril de 2010

Continua su lucha la Fraternidad Americana

Mientras se anuncia el fraude por parte de una Federación a numerosos inmigrantes en Nueva York, la Fraternidad Americana intenta contactar a Gloria y Emilio Estefan, esto antes de que se reúnan con el presidente, Barack Obama.

La directora ejecutiva, Nora Sándigo, le envió una carta al famoso matrimonio y esto fue lo que expuso.

Dear Mr. & Mrs. Estefan,

To many across this nation and undoubtedly across the world you have become a beacon of hope; a hope that there will always be someone fighting for equality, justice and freedom. As a leader of the non-profit organization American Fraternity, whose sole purpose is to aide those who are underrepresented, oppressed, or unjustly and inhumanely treated, I know first-hand the struggles and obstacles one is faced with. Moreover, to see anyone succeed and be as influential as you are in the difficult battle for human rights and against injustice gives me hope for a far brighter and happier future. This is one of the many things we have in common.

As you prepare for your battle against those who are unfairly imprisoned in Cuba, I prepare for the fight on behalf of many US-born children whose lives are being affected to a greater degree than anyone imagines. The beauty and magic of their childhood is being taken away from them just as their civil and human rights are being violated. Hundreds of thousands of children have been separated from their parents and are undergoing hardships due to the effects of immigration raids and deportations.

These children are U.S. Citizens by birth and are supposed to enjoy the very same rights delineated by the Constitution in the 14th Amendment. Unfortunately, what is occurring is quite the contrary. Nowhere in the constitution does it mention that the nationality of parents or ancestors is legal grounds to deprive a Citizen of hi/her civil rights. These children are facing major emotional, psychological and economic crises. They need the attention of doctors, social workers, therapists and psychologists to help cope with their guilt and paranoia after such a great loss. The protection of the basic needs and rights of the most vulnerable citizens of this country were overlooked when harsher and stricter immigration policies were implemented. Our most vulnerable citizens are paying the consequences of failed immigration policy.

When I saw the dire and ever-growing need in these children, the “Don’t Leave Me Alone” campaign was formed. American Fraternity does the best possible in bringing some sort of relief and help to them on a daily basis. The children that make up the campaign were present during last month’s rally for immigration reform in Washington DC. They have sent numerous amounts of letters to our President Barack Obama urging him to listen to their cries.

When I heard about the dinner you will be hosting for President Obama, all I kept thinking and picturing in my mind were the faces of these distraught children. This may be their once in a lifetime chance to meet face to face with their President. Please find it in your hearts to give the opportunity to one child to speak on behalf of hundreds of thousands of children for just one minute with President Obama. After all, the future of this nation lies within its youth – so why not invest in it and protect it! I look forward to hearing from you. I wish you all the best in all your endeavors as leaders and as humanitarians.

Mientras algunos aún celebran los cambios en la Reforma de Salud, la Reforma Migratoria sigue rezagada, a la espera de que la consideren lo suficientemente importante como para trabajar en ella. Ya en una ocasión había mencionado que el gobierno de Obama, primero trabajaría con el asunto de la salud, luego con la Reforma Energética, y una vez esta esté resuelta, quizás le toque el turno a la Reforma Migratoria. Y me pregunto, para ese entonces, ¿cuántas familias más habrán sido separadas?

miércoles, 12 de agosto de 2009

Aplazada la reforma migratoria

Nadie se sorprende de que un político no cumpla su promesa; sorprendente sería que cumpliera con ella. Así que, se repite la historia…

El presidente Barack Obama dijo durante su campaña electoral que si resultaba electo se ocuparía de la reforma migratoria durante los primeros 100 días de su presidencia. Y puede que se interprete como dos cosas, o es una promesa a medias, o no cumplió. El tema en el Congreso se ha mencionado, pero se ha aplazado por unas razones u otras, pero lo cierto es que nada se ha hecho al respecto. Según Obama las demoras con la aprobación de la reforma de salud obligan a retrasar la presentación de una reforma migratoria hasta el periodo entre los meses de noviembre y marzo, esto si la agenda del Congreso fluye como tienen previsto. Tanto la reforma de salud como la reforma energética tienen prioridad en el calendario del Congreso. La reforma migratoria ni siquiera tiene una fecha para discutirse entre los demócratas y los republicanos. Según publican en univision.com el presidente dijo que él no tenía una "bola de cristal" para predecir su aprobación.

“Entiendo que no es fácil para el presidente ni su administración reparar un sistema migratorio que lleva años de fracasos encima, pero recibimos esta noticia con indignación y frustración debido a la confianza que el pueblo hispano depositó en el Presidente Obama y sus promesas de campaña. Sin embargo quiero que el pueblo inmigrante sepa que no es momento para desanimarse. No nos podemos dar por vencidos, es ahora cuando más necesitamos usar nuestros recursos –haciendo demostraciones y convocatorias - y mantenernos unidos en fe y esperanza para demostrar que somos y tenemos una voz en esta gran nación”, dijo Nora Sandigo, defensora de los derechos de los niños ciudadanos americanos e hijos de inmigrantes. Sandigo reconoció que la política es así y que no existe tiempo límite de los políticos en el que se pueda confiar.

viernes, 24 de julio de 2009

Separan familia de inmigrantes

Sweetwater, Fl. - El matrimonio Elías llegó a Estados Unidos hace 18 años. Establecieron una familia y tuvieron tres hijos. Pero, la madrugada del 2 de julio de 2009 la vida de todos cambió. Las autoridades llegaron hasta el hogar de la familia Elías y arrestaron al padre. Su destino: Guatemala.

Yoselyn Elías, de 13 años, Grevin, de 12 y Josué, de 11, ahora sólo viven con su madre, Mirna Elías. Según Mirna, para no dejar los niños, ciudadanos americanos, solos las autoridades optaron por ponerle un grillete a ella. Uno de los menores padece de diabetes y a Elías le preocupa la salud de éste, pues reconoce que en su país no tiene los medios económicos necesarios para brindarle a su hijo la ayuda médica que necesita. “Lo único que yo quiero hacer y estoy haciendo en éste país es luchar por mi familia, salir adelante, darles el estudio que ellos merecen porque yo no los tuve (estudios) en mi país. Yo quisiera que mis hijos salieran adelante con sus estudios y todo lo que merecen”, dijo Elías. Su situación se agrava, pues aunque no la deportaron con su esposo sabe que si no consigue la ciudadanía estadounidense antes del 3 de octubre, será deportada.

jueves, 23 de julio de 2009

Vuelven a protestar

Sweetwater, Fl. - Los hijos de inmigrantes indocumentados volvieron a protestar ante el retraso de la reforma migratoria. Decenas de niños, ciudadanos norteamericanos, con bandera estadounidense en mano, corearon al unísono “no me dejes solo, I want my mom and dad”.

Nora Sandigo, directora ejecutiva de la Fraternidad Americana, acompañada por el abogado y presidente de la Fraternidad, Alfonso Oviedo, hablaron en nombre de los menores. Estos hicieron un llamado a la Comisión Internacional de Derechos Humanos. “Vamos a lograr tocar el corazón del Presidente (Barack Obama) tarde o temprano. Si el Presidente no quiere escucharnos acá, en Estados Unidos, va a tener que pasar la vergüenza de que a nivel internacional le digan, ¿qué está pasando con tus hijos?, ¿qué está pasando con los niños ciudadanos americanos en tu propia casa?”, dijo Sandigo, representante y defensora de los niños ciudadanos americanos hijos de inmigrantes.

Con evidente dificultad para expresarse en español, la adolescente Kenvelin Villalta, habló en nombre de los niños, que en estos momentos se encuentran separados de sus padres y de aquellos que podrían estarlo. “Yo sé cómo están sufriendo estos niños. Yo pasé por todo esto. Yo estoy aquí para apoyar a los niños que pronto van a estar con mamá o papá que fueron deportados. Sé que es difícil, yo estoy aquí para darle esperanza”, expresó Villalta, la única de las jóvenes presente que pudo hablar, ya que los demás fueron traicionados por las emociones y no pudieron.

La protesta culminó con la entrega de canastas de alimentos y útiles escolares para cada niño, artículos que fueron donados a la Fraternidad por diversas entidades.

Mira imágenes de la protesta.